Campos de Fresas
Jordi Serra i Fabra
Avances en la lectura:
Loreto llegó al hospital, entró en la habitación de Luciana. Ella le hablaba, le explicaba que no había vomitado y le suplicaba que no se fuera porqué quería que la ayudara. La Luciana sentía como su amiga le hablaba y se alegraba por ella porqué había hecho un primer paso.
El traficante fue a ver a su subministrador y le dijo que plegaba por lo ocurrido con Luciana, pero el camello le dijo que esa noche tenía que vender todo lo que tenía y entonces luego, podría plegar.
El periodista fue a ver a su jefe, le enseñó las fotografías y éste le dijo que se asegurara de que Luciana seguía en coma y entonces redactara el texto.
Eloi llamó al hospital y le dijo a Norma que estaba buscando el camello, entonces Normal le dijo que Luciana seguía igual y que estaba con Loreto.
Por otro lado, los tres amigos estaban en un taxi de camino a donde habían quedado con Eloi e iban hablando de camello. Cuando llegaron, Eloi ya los esperaba en la esquina y se encaminaron hacia donde Raúl había dicho que se encontraba el camello.
El ayudante del inspector se enteró del funcionamiento de las discotecas y que en aquel momento sólo había una abierta para "niños ricos", se llamaba Popes y allí estaba el camello. Los amigos de Luciana llegaron a la discoteca y comenzaron a buscarlo.
El periodista acabó su artículo sobre Luciana y lo leyó en alto.
El inspector y su ayudante se encontraban en el coche. Había mucho tráfico y entonces el inspector hizo encender la sirena porqué no avanzaban.
Los chicos continuaban buscando al camello por la discoteca, volvieron a salir a fuera para ver si estaba por los alrededores, pero tampoco. Entonces, entraron de nuevo y se separaron para buscarlo.
Loreto volvía a casa en taxi pensando en Luciana y en que si su amiga moría, ella ya no tendría fuerzas para luchar contra su enfermedad.
La familia de Luciana continuaba en el hospital, a su madre le parecía que se moría pero no era así. Norma que aún estaba ahí, se fue al lavabo y se puso a llorar.
Eloi en la discoteca, se fue al lavabo a buscar al camello pero en el lavabo de los hombres no había nadie, pero en cambio si que había un hombre en el de las mujeres vendiendo.
El inspector y el ayudante llegaron a la discoteca y querían aparcar cerca de la entrada para vigilar la discoteca.
El camello salió del lavabo de las mujeres y se dirigió a la barra, entonces se dio cuenta de que Eloi lo vigilaba y se dirigió hacia la puerta. Así que, Eloi y Màximo lo siguen pero el camello consigue salir de la discoteca y Cinta y Santi se dieron cuenta demasiado tarde...por lo tanto el camello se escapaba.
El inspector encontró un sitio para aparcar entonces de repente, vio como el camello salía corriendo de la discoteca y al grupo de amigos detrás de él.
Loreto llegó a casa, se abrazó a su madre y le dijo que Luciana quería vivir y que ella, también quería vivir, que se quería curar.
En la discoteca, la persecución continuaba, Cinta se quedó atrás pero los tres chicos continuaban corriendo, primero Eloi, después Máximo y después Santi. Los policías se unen a los chicos y corren detrás de ellos.
Sin esperarlo el camello se resbaló y cayó, pero antes de morir de un fuerte golpe en la nuca éste lanzó por una alcantarilla las pastillas. La policía examinó el cadáver pero no le quedaba ninguna pastilla. Lo que encontraron fue la dirección donde se encontraba el jefe del camello y entonces se encaminaron hacia allí.
Los cuatro amigos deciden volver al hospital y la Cinta expresa su alegría. Los demás no entendían por qué hasta que ella alarga la mano y les enseña una pastilla que se le cayó al camello mientras corría.
En el hospital Luciana salió del coma, ganó la partida. Su hermana la miraba boquiabierta y no se lo creía. Entonces llamó a sus padres rápidamente. La Luciana estaba viva.
El ayudante del inspector se enteró del funcionamiento de las discotecas y que en aquel momento sólo había una abierta para "niños ricos", se llamaba Popes y allí estaba el camello. Los amigos de Luciana llegaron a la discoteca y comenzaron a buscarlo.
El periodista acabó su artículo sobre Luciana y lo leyó en alto.
El inspector y su ayudante se encontraban en el coche. Había mucho tráfico y entonces el inspector hizo encender la sirena porqué no avanzaban.
Los chicos continuaban buscando al camello por la discoteca, volvieron a salir a fuera para ver si estaba por los alrededores, pero tampoco. Entonces, entraron de nuevo y se separaron para buscarlo.
Loreto volvía a casa en taxi pensando en Luciana y en que si su amiga moría, ella ya no tendría fuerzas para luchar contra su enfermedad.
La familia de Luciana continuaba en el hospital, a su madre le parecía que se moría pero no era así. Norma que aún estaba ahí, se fue al lavabo y se puso a llorar.
Eloi en la discoteca, se fue al lavabo a buscar al camello pero en el lavabo de los hombres no había nadie, pero en cambio si que había un hombre en el de las mujeres vendiendo.
El inspector y el ayudante llegaron a la discoteca y querían aparcar cerca de la entrada para vigilar la discoteca.
El camello salió del lavabo de las mujeres y se dirigió a la barra, entonces se dio cuenta de que Eloi lo vigilaba y se dirigió hacia la puerta. Así que, Eloi y Màximo lo siguen pero el camello consigue salir de la discoteca y Cinta y Santi se dieron cuenta demasiado tarde...por lo tanto el camello se escapaba.
El inspector encontró un sitio para aparcar entonces de repente, vio como el camello salía corriendo de la discoteca y al grupo de amigos detrás de él.
Loreto llegó a casa, se abrazó a su madre y le dijo que Luciana quería vivir y que ella, también quería vivir, que se quería curar.
En la discoteca, la persecución continuaba, Cinta se quedó atrás pero los tres chicos continuaban corriendo, primero Eloi, después Máximo y después Santi. Los policías se unen a los chicos y corren detrás de ellos.
Sin esperarlo el camello se resbaló y cayó, pero antes de morir de un fuerte golpe en la nuca éste lanzó por una alcantarilla las pastillas. La policía examinó el cadáver pero no le quedaba ninguna pastilla. Lo que encontraron fue la dirección donde se encontraba el jefe del camello y entonces se encaminaron hacia allí.
Los cuatro amigos deciden volver al hospital y la Cinta expresa su alegría. Los demás no entendían por qué hasta que ella alarga la mano y les enseña una pastilla que se le cayó al camello mientras corría.
En el hospital Luciana salió del coma, ganó la partida. Su hermana la miraba boquiabierta y no se lo creía. Entonces llamó a sus padres rápidamente. La Luciana estaba viva.
FI
Laura Salvador.
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